Whisky de malta con solera. Añejado en barricas europeas de roble viejas y nuevas por no menos de 15 años. Este whisky está madurado en cubas de Solera únicas de Glenfiddich. Barrica inspirada en las bodegas españolas y portuguesas.
Se encuentra dentro de los whiskys de malta mejor valorados y vendidos del mundo.
En nariz se aprecian aromas a caramelo de vainilla junto a aromas a frutas y miel de brezo.
En boca resulta un whisky con cuerpo, intenso, con un suave sabor a roble y notas de mazapán, canela y jengibre.