Añejado en barricas de roble envejecido y en barricas de roble americano de primer llenado.
En nariz aparecen aromas cítricos y notas frutales.
En boca resulta dulce, con notas frutales como naranjas, peras y toques de manzanas caramelizadas. Notas agridulces aparecen también en su cata, combinando los sabores clásicos del whisky con su peculiar sabor dulce y frutal.